Un par de presentaciones en una misma noche...

El 31 de octubre de 2012, junto a mi amigo Juan Montecinos Gutierrez acompañándome con su ejecución de la flauta traversa, tuvimos una presentación en la sala Mario Berrios de la casa central de la Universidad ARCIS, en Santiago de Chile. Este concierto surge como iniciativa de los integrantes del Programa de Filosofía, Arte y Cultura de dicha institución. Entre ellos, debemos mencionar de manera especial al filósofo Antón Gianelli, quien propiciara dicho evento a partir de su buena impresión y posterior, digamos algo así como "divulgación" entre sus compañeros, de nuestro disco QUE FUE TODO ESTO..., que llegara a sus manos por una feliz coincidencia para nosotros.

Quiero destacar que este recital fue la oportunidad para juntarnos, por primera vez en un escenario, con mi querido amigo Juan Montecinos, quien participara también de las grabaciones de nuestro disco, aportándonos con su virtuosa ejecución de la flauta. Él es integrante del grupo Mensaje (ya hablaremos en otra oportunidad de este grupo, que para mi merece una mención especial y más extensa).

La verdad es que, para esta presentación en la ARCIS, no pudimos tener la cantidad de horas de ensayo que estimábamos como necesarias, pero las que tuvimos fueron muy gratas, en medio de cafés, sandwich, y conversación... Juan tiene una extraordinaria calidad humana, y además de profesor, es un músico talentoso y experimentado, que se prepara y estudia para ser cada día un mejor profesional, de allí que expreso mi fortuna y mi orgullo de poder contar con su colaboración para este proyecto musical, no obstante, su escaso tiempo disponible...

La posibilidad de haber contado con un espacio muy adecuado para lo que fueron nuestras jornadas de ensayos, se la debemos a la Casa de la Cultura Victor Jara, en la comuna de La Cisternas, que a través de su director, Germán Rojas, nos cediera por varias horas y unos cuantos días "la sala del piano de cola", como se aprecia en la fotografía, en las dependencias de este espacio cultural para la comunidad.

Este concierto, me ha servido para comprenderme mejor en mi afán de perfeccionar la dinámica "en vivo", en realidad, cada concierto nos aporta una experiencia nueva y necesaria al respecto. Tuvimos que  reflexionar también acerca de las deficiencias de nuestras estrategias de difusión, que se despliegan muy ineficaces todavía... Este trabajo es una experimentación constante en cuanto a las posibilidades que se puedan explotar para la difusión. A ratos se nos desaparecen todas las coordenadas de referencia y hay que acudir al instinto. Aún no podemos hablar de buenos resultados... Insisto, me refiero al tema de la difusión... Hemos hecho un gran disco, pero cómo lo llevamos al "gran" público, sin el presupuesto y los contactos necesarios, sigue siendo nuestro "gran" problema. No ha bastado con estar aquí plasmada la obra de Armando Uribe Arce para que esto fluya por sí sólo, o más bien sin mayor respaldo de los medios de comunicación. Él nos aporta su maravilloso texto y su apoyo explícito, pero, es probable que buena parte de su público o seguidores no se hayan enterado aún de este proyecto que musicaliza su obra... Hay mucho trabajo por hacer. Las ideas no se agotan, pero, las manos no nos alcanzan. Y esto, nos lleva a ocupar más tiempo de lo normal para lo que se denomina como etapa de "promoción", que ya queremos verla superada en tanto pareciera recién comenzando. En fin...

Una vez finalizada esta presentación en la ARCIS, nos fuimos, junto a un grupo de amigos asistentes, a un local o pub llamado "Chancho 6", donde prosiguió nuestra conversación derivada de este evento musical mío, entre otras cosas relativa a cada cual, y donde, al tiempo de cervezas y algo para comer, disfrutamos de una "noche de poetas" que en el escenario de aquel lugar daban lectura a su obra. Y como mi trabajo es atingente al género en cuestión, fui convencido por este grupo de amigos para subirme al escenario y cantar, de manera espontánea, "Tendré la misma suerte"...

Para finalizar esta pequeña nota o reseña personal de aquella jornada, quiero compartir esta reflexión de Paul Valéry, y que está muy vinculada, creo yo, a una de las razones que determina de qué forma sea percibido por el público un trabajo como el que propone nuestro disco:

"Pensad en lo que hace falta para gustar a tres millones de personas. Paradoja: hace falta menos que para gustar a cien. No escribo para personas que no puedan darme una cantidad de tiempo y una calidad de atención comparables a las que yo les doy".

"No es nunca el autor el que hace una 'obra maestra' . La obra maestra se debe a los lectores, a la calidad del lector. Lector riguroso, con sutileza, con lentitud, con tiempo e ingenuidad armada. Sólo él puede hacer obra maestra, exigir la particularidad, el cuidado, los efectos inagotables, el rigor, la elegancia, la duración, el impulso. Pero ese lector, cuya formación y cuyas fluctuaciones constituyen el verdadero objeto de la historia de la literatura, se está muriendo".

Me parece que estas reflexiones del poeta Valéry, planteadas en la primera mitad del siglo XX, perfectamente pueden extrapolarse al fenómeno que determina nuestra llegada al público en el ámbito de la música popular con contenido, y que hoy, con mayor razón se dificulta, en consideración al fluyo gigantesco de información y de elementos de distracción o entretención banal, en medio de los cuales debemos abrirnos el paso, que se percibe, de pronto, como una verdadera pretensión de "contar estrellas"...


Javier Farías Aguila

Javier Farías cantando "Tendré la misma suerte" en el pub Chancho 6.

Juan Montecinos Gutierrez escribiendo los arreglos, en la sala de
ensayo de la Casa de la Cultura Victor Jara.

Javier Farías junto a Juan Montecinos en la sala de ensayo en la Casa de la Cultura Victor Jara, en la comuna de
La Cisterna, en Santiago de Chile, octubre de 2012.

Video de la presentación de Javier Farías junto Juan Montecinos en la ARCIS, y la canción La muerte simplifica... del disco QUE FUE TODO ESTO...