sábado, 28 de septiembre de 2019

Las noches sin Alma (tema instrumental)

Es un tema instrumental que llegó solo; sin mediar búsqueda alguna. Se trata de una manifestación derivada puramente del estado de ánimo del momento, quizás un estado especial que como aquellos que terminan en lágrimas o risas, esta vez se resolvió en una delicada y al mismo tiempo enérgica expresión armónica.

Acá les presento no solo su grabación de estudio sino también su video, que aunque sencillo -es decir con bajo presupuesto- llega a ustedes con sus recursos mayormente creativos, y con elementos fortuitos muy significativos también: la participación no buscada de un par de aves que aparecen en el cielo llegando al final del video, es uno de aquellos... Imágenes que en su totalidad vienen a complementar de buena forma este trabajo para su difusión. 

Fue grabada en los estudios de Pancho Millán Rodriguez (Los Chacareros de Paine) en Santiago de Chile, y el título ("Las noches sin Alma"), a petición de quién escribe, fue propuesto hace varios meses por otro Pancho: Francisco Parada, un joven amigo de veinte y algo, estudiante de teatro y música, por quien aposté la conexión con este trabajo musical pidiéndole tal sugerencia, luego de acompañarme y escucharme -como espectador y percusionista varias veces- para mis presentaciones en la estación San Miguel del metro de Santiago, donde yo he tocado para el programa "Música a un Metro". Finalmente, creo que tal título, no pudo ser más acertado.

Por fortuna o lucidez, comprendí desde un principio que esta música no debía contener un texto. La mayor parte de las veces mis canciones surgen así: a partir de una melodía o una armonía esbozada con la guitarra. Y también comprendí, a la luz de los resultados, que salvo por algunos delicados sonidos armónicos no era necesario interpretarla con más de una guitarra; a veces los arreglos terminan estropeando el espíritu de la idea original. En pos de tal equilibrio, para los arreglos, hube de trabajar también en una intervención vocal muy cuidada, pertinente, de total compenetración.

Pues bien, sin más palabras por el momento, les dejo "Las noches sin Alma" (Alma, como sustantivo propio).

"Las noches sin Alma" (pieza musical de estilo libre)
Compositor e intérprete: Javier Farías Águila
Video: PEL Producciones.


JFA






sábado, 21 de septiembre de 2019

El canto de las ballenas del bosque

(Reselva nacional Federico Albert, Chanco)

Allí, donde los troncos derribados permanecen verdes por el musgo, los árboles añosos, retorcidos por la ráfaga, emiten un sonido agudo, musical e indecifrable en las alturas; tras cada ola de viento cantan las ballenas del bosque.

JFA


lunes, 12 de agosto de 2019

No cabemos todos en el mismo sueño

Pareciera que tantos somos soñando lo mismo que no cabemos todos en el mismo sueño...

Pero ¿qué es lo que te quita el sueño del sueño? ¿Qué cosas han de señalar "la frustración" del artista o de su tentativa?: ¿No ver nuestros nombres entre quienes ostentan la fama y lo que conlleva aquello en términos de poder o podercillo? ¿No vernos admirados "estúpidamente" por un público fetichista  o gente esnob, consumidores de arte a partir de la validación otorgada por los medios banales? ¿No poder morirnos jóvenes por una sobredosis de droga, alcohol o sexo revuelto, con la "tranquilidad" de haber alcanzado ya para entonces un estatus de celebridad millonaria? ¿No tener la oportunidad de responder en ese tan manoseado juego repetido hasta el cansancio, conocido como "pingponéo" del típico talk show televisivo, donde a la mención de una sola palabra del entrevistador, el invitado, con gafas oscuras, rendido a la imbecilidad por tratarse solo de la televisión, debe responder la primera que se le venga a la mente? ¿No llegar -a propósito de la pregunta anterior a esta- a ser entrevistado por un tal Jaime Bayly?... 


JFA



miércoles, 7 de agosto de 2019

Una nueva versión para La soledad, canción de Pablo Milanés

Hace muchos años, sin referencias previas al respecto, adquirí un disco de Pablo Milanés que llamó mi atención, primeramente, por tratarse de lo más nuevo del cantautor en aquellos días. Era la producción titulada Orígenes, publicada en Chile por el Sello Alerce en 1993.

Luego de una y otra vez escuchándolo, se convirtió en uno de mis favoritos. Y de tanto reproducirlo, personas cercanas a mi, terminaron "contagiadas" con tal predilección mía, percibiéndolo seguramente con la misma sensibilidad o identificación bajo las cuales hube de disfrutar su contenido. En consecuencia, tal ejemplar pasó por varias manos, y oídos, en condición de préstamo... 

La difusión de las canciones del disco Orígenes, a través de los medios radiales chilenos -no obstante tratarse de un Milanés ya muy reconocido- era paupérrima. La única canción que tuvo algún grado significativo de difusión, como parte de la banda sonora de una telenovela nacional, fue La soledad.

Se trataba (o se trata aún por cierto) de una producción discográfica completísima. No le faltaba ni le sobraba nada, y cada canción valía por si misma. Sus textos, de profunda y directa significación humana, sus particulares y acertados arreglos orquestales, las maravillosas melodías, y, en mi opinión, la mejor condición y madurez vocal de Pablo Milanés de toda su carrera, conformaron una totalidad muy potente.

A partir de los aspectos ya descritos, considero que este disco, y aquel titulado Proposiciones (1988), como un todo, son los mejores que Milanés haya publicado.

Y bien, de tal contacto e identificación por esas canciones, he destacado de entre ellas justamente la misma que ya mencioné, y que antes de su relativa difusión yo la consideraba entre mis preferidas, resultándome posteriormente "tan propia", tan placentera y natural de cantarla: La soledad... Acá les dejo mi versión de aquella, en un video sencillo (con imágenes que me pertenecen) y estrenado hace poquito, junto con su texto original.

JFA





La soledad
es un pájaro grande multicolor
que ya no tiene alas para volar
y cada nuevo intento da más
dolor.

La soledad
anida en la garganta para esperar
el grito que se arranca con su
cantar cuando llega el silencio
del desamor.

La soledad
a veces tiene ganas de acompañar
el rostro que recuerda mal
aquel amor que nunca fue para
soñar.

La soledad
inventa la más bella aparición
remueve los rincones del corazón
para quedarse sola la soledad...
con su niñez
su mocedad
con su vejez
para llorar
para morir
en soledad.









martes, 30 de julio de 2019

Y mientras todo pasa... me estoy muriendo de a poquito

Me estoy muriendo de a poquito. / Todos se mueren poco a poco. / El niño que se saca un moco / como la vieja que toma tecito (...). Versos de Armando Uribe Arce, del libro titulado "De Muerte". Escenas, en este último par de versos, ajenas a la muerte mientras esta va ocurriendo, y que nos llevan a pensar que en realidad el verbo, el paradigma, es estar muriendo y no viviendo. 

Cada segundo de las transformaciones biológicas que "padecemos" es un estar muriendo, en dirección al colapso orgánico. Si bien, tal reflexión -la del poeta- no tiene una connotación dramática, tampoco busca ser humorística. Es lo que es. Una descripción de la realidad objetiva, ni siquiera descarnada diría yo, y que de tan común y diaria, pareciera desbordarse de un bostezo indiferente, imperecedero. 

(El niño no sabe, pero la vieja, tras cada sorbo, probablemente hace como que no espera nada...)

Dejando de lado los aspectos filosóficos del caso, alguno creyó por ahí que solo se trataba de un simple y repetitivo estribillo pegajoso, concebido para que "todos conmigo", al unísono, lo cantáramos al pulso de unas palmas participativas (aunque con cierta desconfianza porque, de buenas a primeras, parece más bien ridículo cantar eso de Me estoy muriendo de a poquito, y más aún con aquello del moco y el tecito...). Pero, no se tome a la ligera, que la culpa del estribillo "popularizante" la tengo yo (que me perdone el poeta). Y sin ser tan serio, tampoco lo es tan no...

JFA








lunes, 1 de julio de 2019

¿"La Janis Joplin chilena" o el valor de ser ella misma?

"Esta mujer es la Janis Joplin chilena"; "Violeta Parra fue la primera punk del mundo"... 

La primera frase corresponde a una cantante chilena; la segunda, al vocalista de un famoso grupo mexicano que tampoco voy a nombrar. El asunto es que las tomo como ejemplo en cuanto a cómo se busca validar con cierta persistencia la obra de Violeta, más allá del valor propio, como si no bastara con el que ya tiene ("autosuficiente" ya en su concepto original e historia ultra conocida), buscando comparaciones que sólo son amables desde la perspectiva de los conceptos o nombres con los que se le compara. 

Si tanto admiramos la obra de Violeta Parra, como era el contexto de la primera frase, supongo mayor homenaje decirlo al revés: Janis era la Violeta norteamericana. Considerando además que Joplin nace mucho después que Violeta... 

Supimos que ser ella misma (hablo de nuestra cantautora) no le resultó gratuito, hay que tenerlo en cuenta. Ser ella misma tuvo un alto costo (y sigue siendo un mal negocio porfiar con ser uno mismo en el mundo de la música). No se limitó a cantar lo que cantaba Edith Piaf por ejemplo, que era una de sus artistas preferidas, sino que se gestaron en lo más íntimo de nuestra folclorista aquellas canciones, hoy universales, que ya le conocemos y con toda su particularidad, osada como fue.

Para Violeta, ser auténtica, no fue sino con dolor y decepciones. Murió siendo ella, en toda su magnitud. Mucho le costó imponerse, así tal cual era, como para que después le estén asociando nombres o conceptos que los medios de comunicación, por efecto de la industria musical en el mundo, validan con ese frenesí fetichista o de merchandising que suele ser, por demás, el alimento para los incautos bajo la bandera del esnob.

No. Ni punk, ni Joplin ni nada menos sino Violeta Parra: folclorista, creadora experimental, latinoamericana, apasionada, cantautora de gran rigor musical y literario por cierto (Gabriela Mistral estaba entre sus mayores antecedentes). No rock star. Y no menor por no sonar como los Beatles. Y no más fresca su libertad creativa o su intensidad, por asociación con nadie que tenga su estrella en el paseo de la fama de ninguna parte.

Si los artistas o el estilo, la disciplina o el género musical de nuestras preferencias son preponderantemente otros, la superposición con respecto a nuestra creadora resulta ser un pésimo homenaje cuando queremos expresar alguna identificación con ella, de forma que termina percibiéndose como algo forzado y más de celebración a tales que a la propia Violeta. 

JFA



lunes, 17 de junio de 2019

Acerca del pensamiento de Jodorowsky

Imagino que don Nicanor le habría dicho a Jodorowsky lo siguiente:
"Mire, puede que usted tenga razón, pero yo sé que no la tiene..."

JFA


martes, 14 de mayo de 2019

Las luciérnagas de Jorge Teillier y Neruda

Ya se sabe del interés del poeta chileno Jorge Teillier por la poesía  de Neruda. Es uno más de los "afectados" por el influjo nerudiano. Incluso, probablemente, para Teillier, Neruda fue también un antecedente para su denominada poesía lárica; aunque el carácter explorador del autor de Residencia en la tierra lo llevara más allá de su pueblo natal, de sus ríos, de sus trenes, escarabajos y bosques de la infancia... 

Como un ejemplo importante de la influencia nerudiana sobre la poesía de Teillier, podemos destacar la musicalidad de los versos y el uso continuo y coincidente de ciertas palabras o imágenes en ellos como: cucharas, monedas o luciérnagas. 

Neruda, como viajero o por destino, fue bastante más allá de su primer entorno; Teillier, en cambio, casi no exhibe un interés descriptivo más allá de la aldea como el centro alrededor del cual giraba su maravillosa imaginación lírica, donde adquieren relevancia los elementos populares y cercanos que dan cuenta de una época además, como la mención de alguna marca de automóvil, de alguna revista; de alguna fiesta tradicional (Reina de la primavera) o de algunos personajes urbanos o del pueblo como los oficinistas, los gatos, la banda militar o los evangélicos; la mención de actores de cine o de alguna película, etc.; pero todos circunscritos en la escena y la nostalgia del origen, y que terminan conformando la particularidad de la obra del poeta lautarino.

No pretendo adentrarme en un análisis que definitivamente merece ser mucho más riguroso que estas modestas menciones o impresiones de un lector común, aunque persistente y complacido, como lo he sido yo de ambos.

Como bella muestra de este vínculo literario entre los dos poetas, podemos destacar este extracto del poema titulado "Cuando todos se vayan", del libro "Muertes y maravillas" de Jorge Teillier:

Y en el pueblo no tendré nada que hacer,
sino echarme luciérnagas a los bolsillos
o caminar a orillas de rieles oxidados
o sentarme en el roído mostrador de un almacén
para hablar con antiguos compañeros de escuela.

Y de Neruda, del poema "Altos de Selva Oscura" (extraído del libro titulado "El joven Neruda", del autor Hernan Loyola / pág. 116):

Hay entre todos un pueblo.
Qué ánimo de decir historias que a nadie importan.
Parado a orillas de una linea férrea,
hombres, piedras, ovejas, y una directora de escuela.
Además los carabineros.
La calle como durmiendo bajo el caserío,
nadie se arrepiente de haber vivido aquí.
En la noche volviendo a mi bodega
tropiezo con veinte borrachos y en los bolsillos
algunas luciérnagas.


Para concluir este pequeño artículo, a la luz de la reflexión acerca de Neruda y Teillier, en cuanto a la influencia de uno sobre el otro (así como del primero naturalmente fueron otros), se puede concluir que la poesía o la literatura en general, no solo es producto de una necesidad personal, derivada de la propia imaginación o de la experiencia íntima, sino que también es una consecuencia del estímulo que nos puede provocar la lectura de algunas obras o de algunos autores determinados, quienes nos conmuevan o nos identifiquen profundamente en su mensaje y en su lenguaje.



JFA


Jorge Teillier y Pablo Neruda











miércoles, 10 de abril de 2019

La foto al agujero negro (diálogos)

- ¿Supiste lo de la foto al agujero negro?
- ¿Se trata de un evento pornográfico? ¿Lo dices en doble sentido o qué?...
- No, me refiero seriamente al evento cósmico.
- Ah, ya. No sabía nada al respecto. ¿Cómo hicieron eso si se sabe que los agujeros negros se tragan hasta la intención de hacer algo así?
- Lo estaba leyendo en un sitio web. Escucha, te lo leo: "Para obtener la imagen, se conectaron las señales de ocho radiotelescopios de todo el planeta, formando de esta manera un gran telescopio del tamaño de la tierra"... ¿Qué tal?
- Pienso en cómo no se me había ocurrido antes...
- Bueno, es la noticia científica del momento. Una de las profesionales involucradas destacó que en esta coordinación de carácter mundial, tuvieron la suerte de contar con cielos despejados en todas las regiones del mundo interconectadas para este propósito.
- Habrán pensado en el dicho al revés entonces: "No hay bien que por mal no venga" porque seguro que ese clima despejado en todas las regiones al mismo tiempo, es un evento más en relación al cambio climático y la sequía global...
- Y escucha esto, te sigo leyendo: "Se trata de la imagen de un agujero negro situado en el centro de la galaxia Messier 87 (M87), a unos 55 millones de años luz de la tierra, ubicada en el cúmulo de galaxias de Virgo". 
- Eso quiere decir que a lo mejor ya ni existe, porque si se logró captar una imagen a 55 millones de años luz de distancia (luz que supuestamente también hubo de tragarse), habla de un evento transcurrido hace tal cantidad de años.
- Lo mismo pensé; y también pensé ¿cómo fue posible aquello de una luz alrededor del agujero en la fotografía, lo cual, además, permitió distinguirlo? Supongo que la fotografía captó el instante de la luz en proceso de ser engullida, y ésta se dio un "tiempito" de llegar hasta nosotros antes de ser devorada por completo. 
- Bueno, es probable que realmente los 10 años de estudios de astronomía o astrofísica, más los doctorados y los años de observación y café, no sean en vano para los profesionales que con un par de fórmulas te puedan explicar eso.
- Y lo último que te leo: "Había dos candidatos a convertirse en el primer agujero negro fotografiado de la historia: el agujero negro de M87 y Sagitario A*, situado en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea"...
-Jajaja ¿pero como escogieron al más lejano entonces? ¿No habría sido más nítida la imagen de este que tenemos acá mismo en nuestra galaxia?
- Tú lo has dicho: tal vez con un par de fórmulas te podrían argumentar lo "ilógico"...

JFA