lunes, 28 de julio de 2014

La postura funcional, los malos homenajes y la emoción barata...

Podría haber simpatías, concordancias con respecto a lo que representa la figura homenajeada, tal vez cierta admiración. O si se trata de un contexto humanitario, podría haber una sensibilidad genuina, tal vez. Sin embargo, a la luz de todo lo que rodea tales menciones de tales personajes, me quedo con la duda que me salve... de la ingenuidad. El sistema nos ha vuelto animales suspicaces.

Hablo del vocalista del grupo U2, por ejemplo, que tiene y ha cultivado una imagen ligada a los derechos humanos, divulgando alguna vez fotos suyas junto a niños africanos desnutridos, entre otras acciones similares, como testimonio de una supuesta preocupación personal por las tragedias humanas del mundo. Y de esto, pudiéramos decir -lamentablemente en un mal sentido- que no es casualidad... Me refiero a que a ese nivel de los procedimientos del marketing, en un contexto de marca comercial que se superpone a todo lo demás (dado que es mucho el dinero en juego en torno a una "mega estrella" del rock), no se tiene contemplaciones éticas de ningún tipo. 

En el caso de este vocalista, llamado Bono -que con su imagen gana millones de dólares- me imagino más bien una postura preconcebida de su parte, y perfectamente funcional con el "negocio de la música" planificado por la industria discográfica. Funcional porque buena parte de sus seguidores o "público objetivo", los que en definitiva sostienen su carrera musical de "mega estrella" , al parecer, se ubican a la izquierda del pensamiento político mundial. 


Así mismo, hay que tener en cuenta que muchos de sus seguidores no necesariamente son verdaderos en sus "posturas", y más bien responden a la moda y a lo correcto de "decir y sentir" (en el mismo orden) en relación a algo: lo bien mirado y conveniente del momento, bajo pensamientos o ideas tan ligeras como lo dicta la tendencia... 


En resumen, podemos concluir una suerte de simbiosis, pero circunscrita a la oferta y demanda, y nada más... La mentira se satisface y alimenta mutuamente. 



No se mal entienda, no se trata de no creer en nada de nada... aunque casi...

De hecho, si observamos al desaparecido Freddy Mercury descubriremos una impronta más verdadera, más sincera, sobre todo cuando esbozaba frases, en sus conciertos, y que resultaban polémicas en el ámbito del pensamiento político de izquierda, alocuciones más o menos como ésta: "quiero verlos bañados en champagne", que por cierto, era como una burla, como un cagarse en el sufrimiento ajeno o la pobreza del mundo. Sin embargo, estimo más apreciable su verdad de decir justamente aquello que lo insustancial de lo contrario, a la luz de su verdadero sentir...

Además, finalmente, ha prevalecido su calidad musical por sobre cualquier posible postura oportunista, como su principal activo para generar seguidores, y por consiguiente las millonarias ventas que sabemos del grupo Queen

A algo como lo de Bono me huele también aquella frase de Lennon: "los de la platea hagan sonar sus joyas"... En este caso, para los que hacemos música, ha primado, felizmente, el legado musical de Lennon y Los Beatles, por sobre otras consideraciones.




Lo que motiva este artículo, introducido por los párrafos anteriores, es, particularmente, lo impresentable que me resultan "los homenajes" que más bien parecen simples posturas y nada más que posturas. 

Donde no se pueden establecer coherencias, y lo que es peor, acaban en una falta de respeto: nuestro Víctor Jara fue "homenajeado" de manera tan burda por Bruce Springsteen, en su presentación en Chile, que no se puede tomar en serio su propósito en tal sentido. 

Sucede que este cantó, esbozó, o más bien balbuceó ("malbuceó" como dijera el cantautor Eduardo Peralta), una de las canciones más hermosas de Víctor, titulada Manifiesto

Sin embargo, por tratarse de Springsteen, la "mega estrella", algunos se han tragado (o se han comprado), hasta con lágrimas de emoción, este mal homenaje que se hiciera en dos acordes, y que terminó siendo, a mi modo de ver, una tremenda falta de respeto... 

¿Por qué? pues, ver el vídeo relacionado: le cambió totalmente, y sin sentido artístico, la hermosa melodía original. 

No basta con que una "mega estrella" invoque el nombre de Víctor para considerar el hecho como un evento trascendente en sí mismo... Dicha canción jamás la preparó como corresponde a una sincera expresión de homenaje, con el respeto que se merece la obra de Víctor Jara.


¿Cómo se lo tomaría Springsteen, o su equipo, una versión así, tan alterada, y en un evento tan público o masivo, de una de sus canciones por parte de un tercero, por distinguido que fuera?...



Así como en el caso anterior me han sorprendido otros, como la versión que Nito Mestre hiciera de Te recuerdo Amanda (que por demás, no obstante mi siguiente reparo, es muy hermosa y conmovedora), y que al parecer proviene de los arreglos y la versión que hiciera el brasileño Iván Lins, donde, ambos, le cambian una misma parte al texto, aquel verso que dice originalmente "que partió a la sierra", y que estos músicos cambian sin justificación visible por "que marchó a la guerra"... 




Como se suele decir: juzgue usted mismo... Dejo aquí los vídeos del caso.


Javier Farías Aguila


Te recuerdo Amanda por Nito Mestre.




Springteen, Manifiesto de Victor Jara:




Manifiesto, original versión grabada de Victor Jara.



Ivan Lins, Te recuerdo Amanda:





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