del libro:
Joaquìn Edwards Bello.
CRÓNICAS REUNIDAS
1921-1925
De la crónica titulada
No existe homogeneidad de la raza ( I )
20 de julio de 1923
extracto
La dureza y crueldad de los conquistadores y colonizadores, su instinto de rapiña, su aprovechamiento desconsiderado de la mano de obra, su creación de una plebe semiesclava, han tenido un largo castigo en su propia sangre, en sus hijos bastardos, los rotos, verdaderos y únicos descendientes de los capitanes, soldados y primeros funcionarios abrazados con Arauco. La prueba es que solamente el bajo pueblo ha conservado los apellidos heroicos y clásicos de la conquista. La aristocracia llegó mucho después a aprovechar esa masa formada de jornaleros. Los vascos, que tanto tiempo han encabezado la política, son enteramente ajenos a la conquista y formación de la masa popular.
Los vascos se sumaron a la casta privilegiada, los descendientes de funcionarios de la colonia y algunas familias extranjeras, de puro origen europeo, y dominaron a la plebe, la casta inferior, hija de indios y conquistadores. Durante mucho tiempo los vascos encabezaron la política y la agricultura.
El roto quedó como peón, mano de obra ciega de todos los europeos que han ido llegando después, sumándose a la clase privilegiada. El único afán de esos extranjeros que llegan y de las empresas extranjeras es conservar la masa amorfa y enviciada que sirve a sus intereses y su rapiña. El obrero chileno ha ganado poquísimo en cien años de vida independiente, continúa viviendo en pocilgas y el dinero que cobra en las faenas vuelve al patrón nacional y al comerciante sin escrúpulos, por la pulperìa, la cantina y el prostíbulo, que es club del peón y del soldado. Las leyes contra el alcohol no se han cumplido, porque no conviene que se cumplan a una ínfima minoría de viñateros. Sólo un patricio ilustre comprendió la lucha contra el alcohol, un patricio digno de la pluma de Plutarco: el general Vergara, que mandó a arrasar sus viñas en Quilicura. Hecho olvidado en esta mísera vida actual. Nunca un general obtuvo una victoria tan grande y limpia contra el vicio y la especulación, verdaderos enemigos de la patria.
(Selecciòn: Javier Farìas Aguila)
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